Ejecutar un buen proceso de selección y reclutamiento de personal se traduce en la contratación del candidato idóneo para llevar a cabo las tareas de un puesto de trabajo específico. Al mismo tiempo, esto se convierte en un aumento de productividad y ahorro de tiempo y recursos por parte de las compañías, evitando la rotación del personal y las pérdidas por el incumplimiento de objetivos.

Las organizaciones están compuestas por un equipo humano que posee habilidades, competencias y por, sobre todo, talento. Una elección acertada es decisiva para el éxito empresarial; por esta razón, los procesos de selección y reclutamiento del talento humano deben desarrollarse bajo premisas de calidad y no enfocarse meramente en los ingresos y objetivos económicos.

 

A continuación, compartimos formas de mejorar positivamente tus resultados de contratación:

 

Lo primero: La definición.

Debemos de tomarnos el tiempo necesario para definir cada etapa del proceso de contratación, pues esto nos ayudará a adaptar mejor la evaluación de cada postulante ante las expectativas de la compañía.

 

Lo segundo: La difusión.

Es clave que nuestras ofertas de puestos vacantes sean descubiertas y atendidas por la gente que está buscando un empleo, esto es sumamente importante para atraer al mejor talento. Utiliza a las redes sociales como tus aliadas en este proceso, cuanto mayor alcance de público tengamos, mayores serán las posibilidades de encontrar al perfil que buscamos.

 

Lo tercero: La discreción.

Con el objetivo de ayudar a acelerar las entrevistas y demás procesos de selección, algunas organizaciones utilizan un enfoque denominado “proceso discreto”, con el cual se busca reducir el ruido y las posibles contaminaciones, permitiendo así a los responsables del departamento de recursos humanos discutir sobre los candidatos hasta que envíen su propuesta.

 

Lo cuarto: La retroalimentación.

Más allá de la rapidez en la propuesta, es importante recibir evaluaciones de calidad. Para esto, debemos asegurarnos de que los responsables de selección sepan describir de forma clara sus conclusiones y así logremos evitar los siguientes errores comunes:

• Resúmenes vagos del currículum de un candidato
• Repetición de información, evaluaciones o cuestionarios, en lugar de dar ejemplos concretos.
• Distraerse con la personalidad o evaluar los atributos no relacionados con el puesto vacante.

Una forma de centrarse en la entrevista de un candidato es asignándole un tema específico para escribir. Establecer una retroalimentación por escrito dentro del proceso de selección, ayuda no solo a tomar decisiones de contratación, sino que también al seguimiento de candidatos para una consideración futura.

Lo quinto: La reducción de los procesos internos.

El hecho de no manejar el proceso de contratación de manera efectiva puede ser una gran pérdida de tiempo, especialmente considerando que a los reclutadores les lleva tiempo encontrar y contratar talento.

El retraso en la toma de decisiones al respecto, podría significar perder a un gran candidato; por lo que perderse por “laberintos”, requisitos, pasos o papeleos internos que suelen ser irrelevantes, podría resultar doblemente contraproducente.

 

A modo de finalizar, recalcamos que la tarea no culmina cuando se haya encontrado al mejor talento, pues en la actualidad es necesario mantenerlo contento dentro de la organización. Debemos establecer estrategias de fidelización, de compromiso y de pertenencia para retener a nuestros colaboradores dentro de la organización, motivándoles siempre a lograr sus objetivos personales y profesionales en conjunto con la empresa.

 

El éxito en la estrategia de contratación del mejor talento será proporcional al éxito de la compañía en sí.